HISTORIA
Nació como fiesta en 1939, a la luz de la reunión anual que los pastores de la zona celebran para repartirse equitativamente los pastos y nombrar al administrador de los mismos. Esta noble tradición hizo ganar a la comunidad pastoril el premio Príncipe de Asturias al Pueblo Ejemplar, en 1994.
ACTUALMENTE
Declarada Fiesta de Interés Nacional, la Fiesta del Pastor, supone todo un alegato a las labores y costumbres que se desarrollan en la naturaleza y perviven arraigadas en la población de la montaña asturiana. Es, además, la única oportunidad que existe de acampar, desde la tarde anterior, en la Vega de Enol, lo que para algunos es principal aliciente de la convocatoria. Esta práctica está prohibida el resto del año en el Parque Nacional de Picos de Europa, que además es Reserva de la Biosfera, y el lugar donde se celebra la fiesta, un lugar que también limita el acceso de vehículos a motor de cuatro ruedas, a excepción de aquellos que participan en la Vuelta Ciclista a España cuando ésta sitúa allí la meta de una de sus etapas más emblemáticas.
A las ocho de la mañana los romeros salen de Cangas de Onís para recorrer los once kilómetros que distan hasta la Vega del lago Enol donde, dos horas más tarde comienza una misa en la pequeña Capilla del Buen Pastor. Terminada la celebración religiosa se reúnen la Corporación Municipal y el Consejo de Pastores en una sesión en la que se efectúa el reparto equitativo de pastos; se elige a quien habrá de administrarlos conforme a la legislación y también se proclama a “La Pastorina” (la pastora más guapa) y a las Damas del Puerto de la Montaña de Covadonga que presidirán todos los actos que se celebran.
A partir de ese momento se inician los eventos deportivos y folclóricos. Una carrera pedestre reúne a numerosos participantes en la escalada a la Porra de Enol, un promontorio granítico junto al lago del mismo nombre cuya cima se encuentra a 1.279 metros de altitud. Terminada la prueba se inicia una competición de carreras de caballos para ejemplares cruzados de mixtos y de pura sangre y acto seguido comienza la de tira de cuerda por equipos.
Hay también exhibiciones en el manejo de perros, exposición de artesanía, degustaciones de quesos artesanos de la zona y actuaciones de bandas de gaiteros, tanto locales como, en ocasiones, extranjeras. También se baila el tradicional Corri Corri. Y para los niños existe una zona de juegos tradicionales donde sus padres pueden dejarlos a buen recaudo mientras disfrutan a su aire del evento.
Los protagonistas de esta fiesta, los pastores de la zona, acostumbrados a velar por sus intereses colectivos desde mucho tiempo atrás, encontraron en 1939 un día del año, el 25 de julio, para divertirse, competir y exhibir tradiciones de alta montaña.

